Ser persona física con actividad empresarial puede ser de gran ayuda al momento de solicitar un financiamiento en el caso de las pequeñas y medianas empresas. Pero, ¿en qué consiste formar parte de este régimen y cuáles son sus ventajas? A continuación se profundizará sobre esto.
Como sabemos, el Sistema de Administración Tributaria (SAT) considera dos tipos de contribuyentes, es decir, personas físicas o personas morales. En la primera de estas categorías entran los trabajadores asalariados o independientes, mientras que a la segunda pertenecen empresas, organizaciones y colectivos que trabajan con un objetivo en común.
Ahora bien, las personas físicas pueden pertenecer a un determinado régimen fiscal dependiendo de su actividad productiva y de la estimación de sus ingresos mensuales y por año.
Según se explica en el sitio web del SAT, con base en estos criterios, existen diferentes regímenes fiscales en los que es posible inscribirse y que conllevan distintas obligaciones y derechos.
Algunos de estos son:
- Régimen Simplificado de Confianza
- Sueldos y salarios e ingresos asimilados a salarios
- Régimen de Actividades Empresariales y Profesionales
- Régimen de Incorporación Fiscal
- Enajenación de bienes
- Régimen de Arrendamiento
En esta ocasión se profundizará más sobre el Régimen de Persona Física con Actividad Empresarial, al que se adscriben contribuyentes con ingresos derivados de actividades industriales (construcción, minería, farmacéutica, textil, etc.), comerciales (cafeterías, restaurantes o instituciones educativas, etc.) o personas que ofrezcan servicios profesionales, como es el caso de contadores, médicos o abogados, entre otros.
Conoce la importancia del régimen fiscal en el financiamiento para pymes
La inscripción al régimen de Persona Física con Actividad Empresarial es útil para emprender, particularmente cuando se está en busca un financiamiento para Pymes, ya sea en una institución bancaria tradicional o en una aplicación de préstamos en línea.
En relación con lo anterior, se estima que el 40% de los contribuyentes en México corresponde a personas físicas, y una parte importante de este porcentaje corresponde al régimen de Persona Física con Actividad Empresarial, especialmente debido al gran número de actividades que se pueden abarcar.
Para lo anterior, es necesario darse de alta en el SAT, obtener un RFC y una e.firma que permita generar comprobantes fiscales.
Ventajas del Régimen de Persona Física con Actividad Empresarial al emprender
Entre las ventajas de pertenecer a este régimen, destacan las siguientes:
- Las decisiones relativas al negocio se pueden tomar de forma directa.
- Permite administrar de mejor forma los costos operacionales.
- Facilita el acceso a préstamos en línea u otras fuentes de financiamiento.
- La gestión administrativa puede ser más centralizada.
A su vez, estos beneficios conllevan algunas obligaciones fiscales, como:
- Estar inscrito al RFC y mantener actualizado este estatus y los datos fiscales.
- Presentar declaraciones mensuales, anuales e informativas con terceros.
- Aplicar la retención del ISR al pago de sueldos de los trabajadores.
- En la Declaración Anual, será necesario calcular la participación del personal en las utilidades del negocio (en caso de haber).
En Pymes Capital ofrecemos a las pequeñas y medianas empresas de México las alternativas de financiamiento a la medida, que les permitirán crecer y progresar en sus operaciones.
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